Confesiones de un Gay

Esta iglesia es una ruina

Bueno, ya me he resistido bastante. Voy a poner verde a ese obispo José Gea Escolano de Mondoñedo – Ferrol o mejor aún, a toda esa iglesia absurda, vergonzosa y deleznable que habita entre nosotros, nos atemoriza y se aprovecha de nosotros.

La verdad no entiendo el doble rasero que la gente de esa iglesia, utiliza para juzgar las cosas. Resulta que eso del matrimonio es un tema absurdo, ya que eso de hombre – mujer es relativamente nuevo en nuestra cultura y además la nuestra no es precisamente ni la más antigua, ni la mejor. Pero ya prescindiendo de ello, que tema hay para muchas páginas, lo que resulta aterrador es comprobar como para algunas cosas, esa iglesia vaquiavelica, vuelca toda su presión y en otras pasan de puntillas o lo que es peor intentan taparlo bajo toneladas de mentiras y dinero.

¿Cómo sino entender que a pesar de que la iglesia se declaro en contra de la Guerra de Irak, no hiciera algo como la campaña iniciada contra el matrimonia gay? Ni declaraciones, ni castigos, ni amenazas. Nada de nada. Silencio (claro el Gobierno de Aznar le daba dadivas en forma de influencia en Educación).

Por supuesto puedo entender sus razones. Creo que a nadie se le escapan.

¿Cómo entender que la iglesia no reaccione ante la multitud de escándalos que días tras día, semana tras semana, mes tras mes y año tras año se van descubriendo? Hoy los diarios adornaban sus páginas con la nueva entrega del cura en holanda que abusó repetidamente de una niña y claro tras pagar una cuantiosa suma por los daños (más la pena impuesta por los jueces) resulta que en una atroz y cruel broma, esa iglesia reclama a su aseguradora (en Holanda) que asuma la cantidad desembolsada en esa multa diciendo que aquello fue un accidente de trabajo: ¿No estaba el cura trabajando en su puesto de trabajo? Penoso, vergonzoso. Ahora nos enteramos por esa misma aseguradora que de esos pleitos perdidos y sumas pagadas en secreto hay hasta para vomitar de asco.

Retroceder en el tiempo de la iglesia, significa recordar todas aquellas cosas por las que esa institución se ha convertido en una lacra de nuestra sociedad, como un vampiro que chupa nuestra sangre día a día para alimentarse y aumentar así sus riquezas.

La iglesia no ha tenido ningún escrúpulo cuando le ha convenido, no se ha avergonzado de sus acciones y utiliza cualquier medio para sus fines, por deleznable que este sea.

Esta no es la iglesia que ellos proclaman ser, no son una iglesia de amor, de comprensión y de perdón. A esta iglesia le encanta utilizar el lenguaje del castigo, de la amenaza, del dolor y del miedo con los seres humanos. Se han convertido en verdaderos expertos, en verdaderos profesionales del CASTIGO, de la AMENAZA, del DOLOR y del MIEDO.

Esta iglesia es una ruina. Algo huele muy mal. Esa casta que se auto-perpetua está podrida por dentro debido a su poder, riquezas e influencias que quieren conservar a toda costa, caiga quien caiga.

¿Entienden esa gente lo que significa la palabra dignidad, honestidad, ética? Creo que el estado, nuestro gobierno y el de otros muchos estados deberían ser mucho más contundentes con ellos.

Un beso hermosos y hermosas.